Fin del sueño de Atlanta. Seguirá en la B Nacional. En cuartos de final, Estudiantes de Caseros derrotó por 1 a 0 a Atlanta en un partido que recién se destrabó después del gol, a comienzos del segundo tiempo. Atlanta puso toda su voluntad a lo largo del partido, pero tuvo pocas opciones ofensivas: solo dos situaciones claras, una en cada etapa. Estudiantes, con algunos jugadores de buen pie, será semifinalista.

Cassano debió prescindir de Valdez Chamorro, suspendido. Y se decidió por Talpone, que había tenido pocas oportunidades en esta etapa, para reemplazarlo. Fue un acierto del técnico, ya que el 8 fue uno de los mejores jugadores del bohemio, con participación clara en las dos situaciones de gol más claras y una salvada en la línea de su propio arco. Del otro lado, el acostumbrado juego del Pincha, con una línea parecida a un 4-2-2-2 en el que se lucía González Metilli, el jugador más talentoso del equipo de Caseros. Cuando todavía se estaban acomodando, Talpone escapó por derecha, se posicionó y esperó el ingreso de Milton Giménez al medio para servirle la pelota. Increiblemente, en el área chica, Milton le pegó muy abajo y la pelota se fue alta. A partir de allí, por unos minutos Atlanta mostró un cierto dominio, pero luego el juego se volvió parejo, y jugado lejos de los arcos. El medio juego bohemio funcionaba correctamente en función defensiva, aunque le costaba generar en ataque. González Metilli complicaba a Ramiro Fernández cuando se metía por la derecha. El lateral tuvo que recurrir varias veces a la falta para parar al volante y a Ruiz Gómez, otro que lo complicaba. En 26’ Ochoa Giménez probó con un zurdazo desde la derecha del ataque bohemio, apenas desviado. El resto de la etapa se jugó en el medio, sin que las delanteras pudieran hacer nada por superar a las defensas. Marcioni fue el que mostró más movilidad en el ataque bohemio, pero tampoco pudo superar a la última línea defensiva del Pincha.

Sin cambios se reanudó la segunda etapa. Pero cuando iban 6’ se definió el partido. Una nueva falta de Ramiro Fernández a unos 35 metros de la línea de fondo, por el costado. Amagó tirarlo González Metilli, lo hizo Ruiz Díaz, y Bandiera apareció por el medio para poner el cabezazo abajo y a la punta para superar a Rago. A partir de allí, Atlanta se lanzó con todo en búsqueda de la igualdad, especialmente tras la entrada de Oyola por Pedrozo. Un minuto después de ingresado, Oyola escapó muy bien por la punta, pero su centro no encontró a nadie para concretar. Enseguida, un centro fue mal tomado por Saracho que perdió la pelota. Antes que Milton pudiera meterla, Randazzo desvió al corner. Poco a poco, Estudiantes logró descubrir que Atlanta estaba jugado en ataque y a intentar así aprovechar el contragolpe para definir el partido. En 18’ González Metilli elaboró una jugada brillante por derecha, y se la dejó a Ruiz Gómez que le pegó mordida. Talpone, sobre la línea, consiguió despejar, y en el rebote trabaron Tecilla y Verón, en lo que pareció existir un penal para los de Caseros, pero Echenique no lo sancionó. En 23’ Bolzicco (había entrado por Verón) enfrentó a Rago, pero tocó desviado. Cassano intentó con Dramisino por un cansado Ochoa Giménez. En 27’ una escapada de Ruiz Gómez dejó a Bolzicco  tocando ante Rago, apenas alto. Un minuto después Atlanta tuvo una clara jugada de empate, bien iniciada por Talpone, y que Marcioni definió ante Saracho en forma defectuosa, desviado y alto. El planteo quedó claro, Atlanta con la pelota, y Estudiantes con la contra. Lo cierto es que tuvo más opciones el que venía ganando. A los 38’ Cassano quemó las naves con el ingreso de Marinucci por Ramiro Fernández. Previtali se metió en la última línea para cubrir defensivamente. Pero la acumulación de hombres de ataque no fue suficiente para que Atlanta generara situaciones de peligro. Pasaron los minutos hasta los 45’ (Rago le tapó una clara a Ruiz Gómez), y luego los 6’ de descuento, y Atlanta no pudo torcer el resultado. Lo ganó Estudiantes y fue justo. Si nos posicionamos en agosto de 2019, la labor de Atlanta, llegando a los cuartos de final por el ascenso ni bien había llegado de una categoría inferior es brillante. Lo cierto es que a partir de marzo de 2020, en que la pandemia impidió la consecución del campeonato, las expectativas de sus hinchas fueron mucho mayores, y haber quedado en esta etapa se siente como poco. En cualquier caso, nunca estuvo tan cerca del ascenso a Primera división desde 1985. Un aplauso para el Pipa Cassano y para los jugadores, que dieron todo.

C.A.Estudiantes (1): Saracho; Garay, Randazzo, Evangelista y García Basso; Rinaldi (ST 19’ S.González) y Melo (ST 40’ Pierce); Bandiera (ST 40’ G.Martínez) y González Metilli (ST 44’ Pellegrino); Ruiz Gómez y Verón (ST 19’ Bolzicco). DT: Mauricio Giganti. No ingresaron: Mastrolía y Figueroa.

Atlanta (0): Rago; Molina, Alan Pérez, Tecilla y R.Fernández (ST 38’ Marinucci); Talpone, Previtali y Ochoa Giménez (ST 24’ Dramisino); Marcioni, M.Giménez y Pedrozo (ST 10’ Oyola). DT: Sebastián Cassano. No ingresaron: Ferrero, Caro Torres, Flores y Bolívar.

Gol: ST 6’ Bandiera (Est). ST 23’ Ochoa Giménez (Atl).

Amonestados: Previtali, Dramisino y Oyola (Atl). Verón (Est).

Arbitro: Fernando Echenique

Cancha: Tigre (neutral). Se jugó sin público.

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