Ya se probó casi todo. El técnico Sebastián Méndez, por ejemplo, ensayó ya en el campeonato al menos con tres sistemas distintos: el 4-2-3-1, el 4-3-1-2 y, por último, el 4-4-2. Este sábado terminó jugando con tres delanteros definidos y dos volantes ofensivos. Los hinchas ensayaron todas las cábalas: ya dieron vueltas por todos los asientos de la popular y la platea. Eso sí: el gol de Atlanta sigue sin aparecer por Villa Crespo. Esta vez fue un 0-0 contra Comunicaciones en el que Atlanta mereció mejor suerte, aunque entregó una nueva versión de sus problemas crónicos en la elaboración de juego.

El equipo, con los mismos once titulares que habían vencido 2-0 a Colegiales siete días antes, buscó -con moderado éxito- arrinconar a un rival muy cauteloso y tibio en ofensiva. Más allá de las dificultades para controlar la pelota, Atlanta consiguió llegar reiteradamente con peligro al arco de Medina. Primero a los 13: Maraschi se filtró entre la defensa luego de un buen toque de Godoy pero cruzó demasiado su remate. Y un minuto después, el punta se metió casi hasta el borde del área chica pero nunca pudo acomodarse para patear.

Lo más claro de esa etapa otra vez fue para Atlanta a los 27 minutos, en una jugada que nació enredada. La defensa trabó un remate de Godoy y la pelota le quedó picando dentro del área a Palisi, quien de frente al arco remató muy mal. Del otro lado, Comunicaciones trataba de reponerse de dos cambios prematuros por lesión: primero Lucas -un central que apeló en reiteradas ocasiones al juego brusco ante el arbitraje previsiblemente permisivo de Gastón Meineri- reemplazó al ex Atlanta Jesús Díaz y luego Tessoro entró por Funes, que se había ubicado como volante central.

Méndez mostró en la segunda etapa la voluntad de sumar poder ofensivo a partir de cambios con una clara intención: así, a los 14, ingresó un delantero neto como Lazzarini por un volante de marca como Palisi. Cinco minutos después llegó la jugada elaborada más exitosa de Atlanta en el partido, pero le faltó -como viene ocurriendo fatalmente- la puntada final: Acuña dejó mano a mano a Godoy y era una ocasión inmejorable, pero el remate del goleador fue muy malo y se perdió completamente desviado.

Después aparecieron otras oportunidades, más producto del empuje que de la claridad. Tampoco ahí quiso llegar el gol. Ni a los 24, cuando Peláez estuvo cerca luego de una serie de rebotes tras un corner; ni a los 33, cuando Francés recibió solo tras otro tiro de esquina y le dio con poca convicción afuera. Ya estaban en cancha Emanuel Godoy y Matías Castro, otras apuestas de Méndez para sumar en ataque que funcionaron con intermitencias.

Pasaron otras oportunidades, vía Lazzarini y Acuña, mientras Comunicaciones se encerraba cada vez más atrás y el público de Atlanta se iba convenciendo de que tampoco este sábado era el día. Llegamos así al 0-0 final, en el sexto partido al hilo sin convertir en Villa Crespo y el undécimo sin ganar. Se mejoró un poco, pero todavía -más allá de que el equipo creció en solidez defensiva y Vega acumula cinco partidos sin recibir goles- falta bastante para que Atlanta se demuestre a sí mismo y a los demás que está para la pelea grande.

Por Federico Kotlar (En Twitter: @fkotlar)

Foto: Vanesa Crisóstomo